Cuenta la historia de dos protagonistas, Oki afamado escritor y Otoko una pintora de gran reconocimiento. A ellos se les irán sumando otros personajes importantes y de una psicología muy variada.
Oki y Otoko tuvieron una relación sentimental cuando ella apenas era una cría, con dieciséis años y él era ya un hombre casado y con un hijo por aquel entonces, Taichiro.
Otoko se quedó embarazada pero finalmente no llegó a buen fin y la relación finalizó entre ellos, al menos físicamente puesto que nunca llegaron a olvidarse.
Oki decide trasladarse a Kioto para ver las campanadas de fin de año, ciudad en la cual en la actualidad vive Otoko y él decide avisarla de que está allí y que desearía volver a verla. Otoko accede, pero no va sola, la acompaña Keiko una discípula que vive con ella y que no solo es eso. Keiko tiene ansias de vengar a su mentora y hará todo lo posible para que Oki pague por todo lo que hizo.
Novela con gran variedad psicológica en cuanto a los personajes que no deja de ser un claro ejemplo de los problemas del autor.
Desarrollada entre las ciudades de Kamura y Kioto y con tintes trágicos desde el principio, hace que se encoja el corazón con cada nuevo detalle de la historia.
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